>
Tendencias Económicas
>
La nueva geopolítica económica: Poder y comercio

La nueva geopolítica económica: Poder y comercio

08/11/2025
Yago Dias
La nueva geopolítica económica: Poder y comercio

En un contexto global marcado por tensiones y alianzas cambiantes, comprender la nueva geopolítica económica resulta esencial para anticipar retos y oportunidades.

Marco conceptual y tesis central

La transición hacia un sistema multipolar en ascenso redefine las reglas del juego. Ya no basta con priorizar la eficiencia y la globalización: emergen la seguridad económica y resiliencia y el control estratégico de cadenas de valor como ejes centrales.

Esta transformación plantea una pregunta guía: ¿cómo se redistribuye el poder económico mundial y qué implica para el comercio, el crecimiento y la gobernanza global?

Para responderla, es clave dominar algunos conceptos clave:

  • Friendshoring, nearshoring, reshoring, de-risking
  • Fragmentación del comercio y sistema financiero global
  • Formación de bloques económicos y comerciales
  • Uso de sanciones, aranceles y subsidios como instrumentos de poder

Estos conceptos servirán de guía para explorar la nueva correlación entre política, comercio y crecimiento.

Nuevo mapa de poder económico: de unipolar a multipolar

Durante décadas, el orden global fue definido por una potencia predominante. Hoy convergen al menos cuatro polos principales: Estados Unidos, China, la Unión Europea y un conjunto de potencias regionales. Este amplio espectro de actores moldea un entorno donde la rivalidad y la cooperación coexisten.

Los datos macroeconómicos recientes revelan tendencias claras:

Según proyecciones del FMI y el Banco Mundial, el crecimiento global rondará el 3 % en 2024 y podría desacelerarse ligeramente en 2025–2026, con economías emergentes superando con creces a las avanzadas.

Este reequilibrio ilustra cómo el poder se dispersa y diversifica, sin que un solo actor reemplace por completo a otro.

Comercio y fragmentación: de la globalización a la “competencia de bloques”

La fase dorada de la globalización, caracterizada por caídas constantes en aranceles y barreras, ha dado paso a un escenario de fragmentación del comercio global. Aranceles, sanciones y políticas proteccionistas redefinen rutas y alianzas.

Organismos internacionales advierten sobre los costes de esta fragmentación: pérdidas de varios billones de dólares en valor agregado y ralentización de las cadenas de suministro.

  • Aranceles protectores crecientes, con promedios no vistos desde los años treinta
  • Medidas antidumping y contrasanciones entre grandes potencias
  • Restricciones a exportaciones de minerales estratégicos y tecnologías sensibles
  • Escenarios de pérdida de PIB global y tensiones en mercados financieros

El resultado es un comercio más lento y segmentado, donde la gestión activa de riesgos reemplaza la confianza ilimitada en la interdependencia.

Junto a la fragmentación, surgen nuevas geografías de producción:

– Friendshoring y nearshoring mueven plantas desde China hacia México, Europa del Este y Sudeste Asiático.

– RCEP, USMCA y acuerdos bilaterales fortalecen bloques regionales.

– Los sectores de semiconductores, minerales críticos y energías limpias son negociados en “mini-acuerdos” especializados.

Sectores estratégicos: tecnología, energía, minerales y defensa

Determinados ámbitos concentran la atención de gobiernos y empresas:

  • Tecnología avanzada: IA, semiconductores, redes 5G/6G
  • Recursos energéticos y renovables
  • Minerales críticos como litio, cobalto y tierras raras
  • Industria de defensa y seguridad cibernética

En cada uno, las potencias aplican subsidios masivos y controles para asegurar cadenas de valor:

• Programas CHIPS y IRA en EE. UU., • Planes de autosuficiencia tecnológica en China, • Políticas de autonomía estratégica abierta en la UE.

La guerra de estándares y la definición de protocolos de ciberseguridad son hoy armas de poder suave e influencia global.

Cómo adaptarse: recomendaciones prácticas

Ante este panorama, gobiernos, empresas y profesionales deben:

  • Evaluar riesgos de cadena y diversificar proveedores
  • Fortalecer capacidades internas y talento local
  • Monitorear sanciones y marcos regulatorios globales
  • Forjar alianzas flexibles y diversificadas

La capacidad de maniobra estratégica global dependerá de la habilidad para navegar tensiones, identificar socios fiables y anticipar cambios en las cadenas de valor.

Conclusión: un nuevo paradigma de poder y cooperación

La nueva geopolítica económica exige un enfoque que combine visión estratégica y adaptación continua. La competencia de bloques no es irreversible: puede coexistir con proyectos multilaterales selectivos y cooperación en áreas críticas como el cambio climático, la salud y la innovación.

Entender las dinámicas de poder y comercio es esencial para promover un crecimiento inclusivo y sostenible en un mundo cada vez más interconectado y fragmentado.

Referencias

Yago Dias

Sobre el Autor: Yago Dias

Yago Dias